Escoger los productos cosméticos adecuados, ¡toda una odisea! Por El Equipo de Farmacia Finca España, 5 julio, 2013 Conocer cual es el género cosmético que mejor nos sienta, comprender la elaboración que nos aplicamos sobre nuestra piel, es un arduo trabajo. La oferta de productos cosméticos es muy amplia, son numerosas las marcas que existen y cada una cuenta con un extenso catálogo para ofrecernos. Consumo de calidad de productos cosméticos El Ministerio de Sanidad y Consumo junto con la Agencia de medicamentos y productos sanitarios nos informan sobre la Reglamentación de los productos cosméticos en base a un consumo de calidad. En 1988 se inicia en España el proceso de incorporación al ordenamiento interno, siendo su última modificación en el año 2000. Las dos últimas incorporaciones que se han realizado son la obligación de: Indicar en el etiquetado de los productos cosméticos las menciones referentes al plazo de utilización de los productos después de su apertura. Utilizar sistemáticamente métodos alternativos a la experimentación animal para la evaluación de la seguridad de los productos cosméticos o de sus ingredientes o combinaciones de ingredientes. Saber qué compramos La información que tiene que plasmarse en los recipientes y embalajes de todo producto cosmético situado en el mercado son: Denominación del producto. El nombre o la razón social y la dirección o sede social del fabricante y del responsable de la puesta en el mercado del producto cosmético. El contenido nominal en el momento del acondicionamiento, indicado en peso o en volumen. La fecha de caducidad mínima. Las precauciones particulares de empleo. El número de lote de fabricación o la referencia que permita la identificación. La función del producto, salvo si se desprende de su presentación. La lista de ingredientes por orden decreciente de importancia ponderal en el momento de su incorporación. Conoce tu piel Es importante realizar un diagnóstico de la piel antes de utilizar un producto que podría ser inadecuado. El entorno, tratamientos cosméticos no aptos, el estrés alteran la calidad de la piel y la fragilizan. Pieles sensibles e intolerantes Se caracterizan por una sensación muy subjetiva de incorfot, tales como las tiranteces, el ardor, los picores; de intensidad variable.Las pieles intolerantes constituyen un estado de sensibilidad extrema donde la piel no aguanta nada. Pieles sensibles y con cuperosis Son pieles que reaccionan a ciertos factores, caracterizándose por aparición de rojeces en zonas localizadas. Si estas rojeces se vuelven permanentes, se habla entonces de cuperosis. Pieles adultas con imperfecciones Se caracterizan por su aspecto apagado y brillante, textura de la piel irregular, poros dilatados y aparición más o menos frecuente de imperfecciones cutáneas. Manchas pigmentarias Aparecen bajo la influencia de diferentes factores como la exposición a los UVA, desórdenes hormonales (embarazo), toma de medicamentos fotosensibilizantes y sobre todo el envejecimiento… Se instalan principalmente a nivel del rostro, el escote y manos. Sequedad cutánea corporal Puede ser pasajera o permanente, inducida por agentes externos climáticos o cosméticos, administración de medicamentos, envejecimiento cutáneo, predisposiciones genéticas…Se caracteriza por una gran fragilidad, falta de flexibilidad, aspecto apagado, con sensaciones incómodas. ¿Conoces tus necesidades estéticas? Qué tipo de producto necesitas, qué problemas de belleza quieres resolver, qué requiere tu piel en estos momentos y/o época. Lo más seguro es que exista el producto más adecuado para ti solo queda identificarlo.
